Roger Price- Bélgica
En mi primer artículo sobre la hermandad universal para la Teosofía Avanzada, "¿Realmente Aspiramos a la Hermandad Universal?" vimos que, según los Mahatmas, la hermandad universal "es el único fundamento seguro para la moralidad universal... y esta es la aspiración del adepto verdadero." Y esto proporciona la base moral segura para el estudio de ideas universales que conducen a un conocimiento de las Leyes de Vida. Este artículo examinará brevemente como un entendimiento de los aspectos místicos de la hermandad universal ayudará a poner nuestro entendimiento de la moralidad universal en "un fundamento seguro", es decir de acuerdo con las Leyes de Vida.
Un modo de considerar la naturaleza y la constitución del universo es considerarlo como una escala de jerarquías de seres desde el más alto al más bajo en la progresión evolutiva de la vida. Dentro de ese esquema, la humanidad no tiene sólo un papel especial sino que también tiene una naturaleza unificada especial. Para entender por qué la humanidad tiene una naturaleza unificada especial tenemos que mirar lo que la Sabiduría Antigua dice sobre nuestra constitución séptuple.
Lo que, cada miembro de la humanidad, realmente es, no debe ser encontrado en nuestra naturaleza inferior solamente, sino en nuestra naturaleza más alta, en nuestros principios más elevados. Esto está en la relación mística de nuestros principios más altos con las jerarquías espirituales más elevadas y, es allí que debemos mirar si queremos encontrar a quién somos realmente y cuál es nuestra relación verdadera con otro. La Teosofía enseña cada uno de los principios de la humanidad y que nos fueron dados por una de las jerarquías. Nos dicen, por ejemplo, que nuestro linga sharira fue dado por la jerarquía conocida como Pitris lunares y que nuestra mente o manas nos fueron dados por la jerarquía conocida como Pitris solares, también conocidos como Manasaputras. Este es el principio último, manas y su jerarquía de donación, que es el más informativo para estudiar a fin de entender más sobre la realidad de la hermandad universal de la humanidad. Brevemente, la enseñanza consiste en que durante la tercera Raza Raíz, hace aproximadamente algo más de dieciocho millones de años, la mente o principio manásico de la humanidad de aquel tiempo fue acelerado por la acción de los Pitris solares, cuyo deber kármico era asistir a la evolución de la humanidad (Escrituras Coleccionadas 12:411):
"La filosofía oculta nos enseña que la mente humana (o Manas) es un rayo directo o la reflexión del Principio más Alto, la Mente de Noëtic. Éste es el Ego de reencarnación que los viejos filósofos arios llaman Manasaputra, "los Hijos de la Mente" o de Mahat, la Mente Cósmica Universal".
Nuestra mente o manas es un rayo directo o reflexión de nuestro más alto manas, que es el Ego en reencarnación, el Manasaputra. La especial naturaleza unificada de la humanidad se debe a la naturaleza unificada dentro de cada jerarquía, en nuestro caso, nuestros Egos más altos, los Manasaputras, cuya "Individualidad es la característica de sus jerarquías respectivas, no de sus unidades" (la Doctrina 1:275 Secreta):
"ninguno de éstos Seres, elevados o inferiores, tienen individualidad o personalidad como Entidades separadas, es decir, ellos no tienen ninguna individualidad en el sentido en el cual un hombre dice, 'soy yo y nadie más'; en otras palabras, ellos son conscientes de las distintas separaciones que hay entre los hombres y las cosas en la tierra. La individualidad es la característica de sus jerarquías respectivas, no de sus unidades."
Cada uno de nosotros, cada miembro "o la unidad" de la Humanidad, no tiene una personalidad o individualidad como una entidad separada. Nosotros y toda la humanidad somos partes inseparables de la jerarquía a la cual pertenecemos. Sin embargo, no se debería pensar que no hay tal cosa como la individualidad en el sentido espiritual dentro de las jerarquías (la Doctrina 2:246 Secreta):
"la tradición muestra a los Yoguis celestes que se ofrecen como víctimas voluntarias a fin de redimir la humanidad creada divina y perfecta primero - y dotada con afectos humanos y aspiraciones. Para hacer esto ellos tuvieron que dejar su estado natural y, descendiendo a nuestro globo, tomar su domicilio en él para el ciclo entero del Mahayuga, cambiando así sus individualidades impersonales por personalidades individuales [cursiva añadida] – es decir, cambiando así la bendición de la existencia sideral por la maldición de la vida terrestre. Este fue el sacrificio voluntario de los Ángeles de Fuego, cuya naturaleza era Conocimiento y Amor."
Así un modo de percibir la diferencia entre la vida en la Tierra y en el plan de la jerarquía a la cual pertenecemos es la diferencia entre personalidad individual e individualidad impersonal. La vida de la personalidad individual experimenta; la clave es percibir la separación del mí. En el nivel de nuestro Ego más alto en su propio plano, la clave parece ser la percepción directa de la unidad de la jerarquía. El sentido de Mí o Individualidad está fundido en una percepción directa de la unidad de vida. Esta percepción no es sólo del Conocimiento sino también del Amor. Este Conocimiento directo de la unidad y su Amor que coexisten es la misma naturaleza de nuestro Ego más elevado.
Aquí vemos que tanto el estudio de ideas universales para conducir al conocimiento de las Leyes de la Vida como también la práctica de la Hermandad Universal son necesarios para nosotros para volver, es decir evolucionar conscientemente hacia nuestra naturaleza verdadera inherente, que es Conocimiento y Amor. Puesto en práctica, tal estudio y práctica conducirán a una mayor influencia en nuestra vida de nuestro Dios interior, nuestro propio Ego más elevado, el Manasaputra, que, de ser escuchado, ayudará al florecimiento de estas cualidades. La ilusión de nuestra personalidad individual aquí en la Tierra nos engaña para vernos separados de los demás y crea todos los problemas de separatividad. El sentido impersonal no frío o indiferente sinó "sin diferencia," de ahí el Amor Universal requerido para la práctica de la Hermandad Universal - es una reflexión de nuestra individualidad impersonal, nuestro Ego más alto y su Amor.
La unidad indivisible de la humanidad en el plano místico del Ego más elevado es la realidad subyacente de la vida humana, y el logro evolutivo de aquel entendimiento es el objetivo verdadero de la humanidad. Entendiendo aquellas dos verdades, podemos comenzar a comprender como la Hermandad Universal puede ser "el único fundamento seguro para la moralidad universal," para lo cual deberíamos vivir nuestras vidas.
http://www.theosophyforward.com/The Mystic-Foundation-Of-Universal-Brotherhood